Si nos remontamos al año 2002, época en la que todo influyó profundamente en la vida de Vic Padilla, especialmente en sus circunstancias emocionales, nos encontramos con un artista que se describe a sí mismo como un desastre total en todos los sentidos. Su música, según afirma, es el reflejo de su depresión y soledad a lo largo del tiempo en este vasto universo.
El proceso de creación de “Pánico” fue para él una intensa exploración de lo que necesitaba expresar en esos momentos críticos de su vida. Hoy, al mirar atrás, el título parece alarmantemente apropiado, un testimonio de su urgente y angustioso estado emocional. Sentirse en “Pánico” y completamente perdido no era solo una metáfora sino una realidad que permeaba su existencia.
Cada pieza de este álbum contiene elementos improvisados que le otorgan una profundidad y un carácter experimental únicos. Se trata de una obra enteramente conceptual y visceral, cargada de emociones densas, oscuras, sombrías y violentas. Estos elementos, según el artista, fueron constantes en todos sus quehaceres creativos, y lejos de rechazarlos, los acoge con entusiasmo.
"Pánico" no es sólo un álbum; para él, fue su salvación. En un momento en el que el suicidio parecía una opción cercana, la música le dio un propósito, recordándole que todavía había mucho por hacer. "Todavía hay mucho más", se decía a sí mismo, y esa convicción lo mantuvo en pie.
El artista invita a todos a escuchar “Pánico”, lanzado en 2002, en su plataforma favorita. Para quienes no sepan dónde encontrarlo, o tengan una plataforma preferida que no menciona, ofrece compartir el enlace a través de otros medios o a través de su correo electrónico personal.
Este álbum es más que música, es un viaje emocional y una ventana a la mente y al alma de un creador en constante evolución. No pierdas la oportunidad de sumergirte en “Pánico” y vivir la intensidad de su universo sonoro oscuro y sin rumbo.